No sabes lo que es el miedo.
¿He dicho miedo? Quizá debería incluso haber dicho «terror».
No sabes lo que es el terror hasta que te sucede la situación más cotidiana de todas pero el suelo que estás pisando no es suelo español, sino que pisas suelo alemán.
Y es que un día, tarde o temprano, por mucho que tengas familiares alemanes que te ayudan con el temido y élfico alemán – aprovecha de tu secretario general del hogar mientras puedas – cuando estás haciendo tus primeros «pinitos» con el idioma, te quedarás solo. Te quedarás sólo y…
¡¡¡TE SONARÁ EL TELÉFONO!!!
Sonará tu teléfono, el fijo de casa y, quizá aún no lo sabes, pero echarás a TEMBLAR. Echarás a temblar cuando en la pantallita veas un número que no es ni el de tus padres ni el de tus suegros. Es un número ALEMÁN.
Y tú estás SOLO (yo estaba SOLA) y deberás contestar.
Siempre hay una primera vez, incluso en el supermercado en Alemania. Bien, pues cuando estés solo en casa, un buen día sonará el teléfono. Y otro día, aún mejor, te atreverás a responder y enfrentarte al miedo por si NO ENTIENDES NADA DE LO QUE TE ESTÁN DICIENDO.
Una de las típicas llamadas puede ser la de la Kita – guardería – como las que recibo yo cuando «la princesa S» está enfermita. PERO esa no cuenta, puesto que les conoces personalmente, estás algo acostumbrado a su tono de voz (y ellos al tuyo) y se esfuerzan para hacerte más comprensible su élfico alemán.
Así que un buen día recibes una llamada de alguien que no conoces de nada. La mía en concreto fue de los de Vodafone. Tras varios intentos de sacármelos de encima indicarles que llamaran en otro momento, me armé de valor: me disponía a preguntar qué querían o qué necesitaban de nosotros.
Retransmito literalmente lo que sucedió en mi «llamada del terror» en Alemania:
Sr. Vodafone Alemania: Hallo, soy el Sr. X de Vodafone y quería hablar con Herr Buenpadre acerca del contrato
Yo: Hallo, soy la Frau de Buenpadre ¿Podría, por favor, indicarme qué es lo que quiere comentarnos acerca del contrato que mantenemos con ustedes?
Sr. Vodafone Alemania: Necesito hablar con el Sr. Buenpadre
Yo: Ya, pero yo soy la Frau de Buenpadre y puede comentarme a mí todo lo que tenga que comentarle a él sobre nuestro contrato
Sr. Vodafone Alemania: ¿Cómo? No. Necesito hablar con Herr Buenpadre
(aquí se produjo un poco de bucle, así que voy a ir al grano)
Yo: ¿No? Sí, no se preocupe. Puede indicarme lo que le interesa comunicar a Herr Buenpadre y yo se lo comentaré o le indicaré a usted si nos interesa. Gracias.
Sr. Vodafone Alemania: ¿Cómo? Eso no es legal ¿Acaso haría usted algo que no fuese legal?
Confieso que estas últimas palabras me indignaron bastante.
Al final, lo dejé correr y, elevando las cejas y dibujando en mi cara una semi-sonrisa, preferí colgar indignada amablemente pero feliz de haberlo comprendido, superado el miedo y darme cuenta de que no era más que una de las tiernas alemanadas.
¿Y a ti? ¿Ya te ha sucedido? ¿Te has enfrentado alguna vez a «la llamada del terror»? ¿Quién estaba «al otro lado»?
25 Comentarios
Roseta
12 junio, 2014 a las 8:50Hola Elisabet,
Yo también he vivido el pánico en mis propias carnes,… poco a poco, lo voy superando… jeje
Una cosa muy curiosa que me pasa al hablar por teléfono, bien sea el médico o la compañía telefónica, es que al principo hablan rápido y normal, a lo que yo respondo «soy española, podría hablar un poquito más despacio, por favor?» y a partir de ahora, la llamada se eterniza porque hacen una pausa de un segundo entre cada palabra, jajaj, es matemático, no falla!
ich
möchte
wissen
ob…
A vosotros también os pasado esto? O solo a mí?
Besitos, ciaooooooo
Elisabet
12 junio, 2014 a las 21:40Roseta,
Jajaja!! Qué bueno! Confieso que me daba tanta rabia decir que no entendía que no lo he probado. Lo probaré y te cuento!!
Gracias 🙂
Gilda Sonnenblume
12 junio, 2014 a las 10:21La «llamada del terror» la recibí cuando llevaba aquí menos de un mes. La verdad es que no lo pensé dos veces, y contesté; me arrepentí según descolgaba el auricular.
Yo: Hallo?
Interlocutor: blu, bli, bla
Yo: Entschuldiguuuuung, ich verstehe nich.
Interlocutor: bli, bla, blu.
Y colgó…
Intuí que se había equivocado de número. Eso sí, yo usé toooodassss las palabras que conocía en aquel momento, jajajaja.
Gilda Sonnenblume
12 junio, 2014 a las 10:23nichT 😛
Elisabet
12 junio, 2014 a las 21:42Gilda Sonnenblume,
Jajajjaajajaja!!! Qué genial! Grande ;D
Me he reído un buen rato. Gracias por animarte a compartir tu anécdota.
Marta
12 junio, 2014 a las 11:41Yo recibí la llamada del terror en España.
Mi marido es alemán pero vivimos en España, así que solemos recibir llamadas de su familia.
Al principio ni se me ocurría descolgar cuando veía el número de mi suegra en la pantallita. Si mi marido estaba lo cogía él y si no que volvieran a llamar. Pero un día me armé de valor y descolgué!
Las primeras conversaciones costaron, no lo voy a negar. No es lo mismo hablar en persona, ayudándote de gestos, que hacerlo por teléfono. Pero hoy en día soy yo la que llama a mi Schwiegermutter una vez a la semana para charlar un ratito 😉
Por cierto, supongo que allí los de Vodafone no son latinos como aquí jejejeje. Aquí por vender hablan hasta con tu vecina si hace falta. La ley se la pasan por el forro… Y de los horarios de llamadas ya ni te cuento, eso sí que es un terror!!!
Elisabet
12 junio, 2014 a las 23:36Marta,
Jejeje!! Muchas gracias por tu divertido comentario 😀
No, latinos no son. Bien germánicos al menos los que me han tocado a mí!
Saludos***
Mamá en Bulgaria
12 junio, 2014 a las 22:15Yo no tengo teléfono fijo, pero si que me he visto en situaciones parecidas con el búlgaro, y efectivamente, es TERROR!
Elisabet
12 junio, 2014 a las 23:43Mamá en Bulgaria,
Es que además lo tuyo en búlgaro, como siempre te digo, es para nota!!!
Saludos guapa***
Carolina
13 junio, 2014 a las 11:04Bueno yo no he tenido suerte jamás en conseguir que me hablen más despacio por ser extranjera. Así que las llamadas desconocidas no las atiendo (sin pizca de culpa). El problema se me presenta entonces con el timbre. Donde si o si tenés que atender la puerta cuando tenés chicos y se escucha claramente desde afuera que sí hay gente en casa. Lo gracioso es que soy descendiente, mi apellido es Müller y me veo muy alemana por lo que cuando digo «disculpe no entiendo muy bien alemán, soy extranjera» me miran de lo más raro. Una vez me pasó que el vendedor de la puerta se enojó cuando le dije que no hablaba muy bien alemán y me dijo «pero Señora usted ESTÁ HABLANDO ALEMÁN» jaja es que esas frases uno las dice tantas veces que ya las dice perfecto. No se como se interpreta en el inconsciente alemán las frases «no hablo muy bien o no entiendo muy bien alemán» porque en mi caso no he tenido suerte con que me hablen más lento o con palabras más sencillas. Pero bueno creo que he pasado del terror a convertirme en una perfecta actriz que intenta interpretar lo que dicen o fingir que entendió.
Saludos!
Elisabet
13 junio, 2014 a las 11:16Carolina,
Jajaja!! Tienes razón!! Que llamen al timbre y estés sola en casa en Alemania es lo MÁS TERRORÍFICO que te puede pasar!! ;D
Más de una vez me ha pasado, ahí, dándolo todo para apañármelas!! Al final utilizaba los preciados gestos internacionales pero aún así… muy dificil!
Gracias por tu comment!
Vianellys Engelstdadter
13 junio, 2014 a las 13:31Jajajaja…hola Elizabet sabes me encanta todo lo que escribes, vivo exactamente todo lo que cuenta… creo que a todos nos pasa lo mismo cuando venimos a este pais a vivir , soy dominicana estoy casada con un aleman y estoy haciendo mis pininos en el aleman, y sabes creo que, no solo he recibido llamada y timbres de terror cuando llega algun paquete por DHL, tambien hay preguntas de terror de mis vecinos cuando muevo los botes de la basura, o cuando me los encuentro en el pasillo o en el cuarto de lavado, me pongo de todos los colores… jajajaja…. intentando responder….jajajaja… creo que todos nos pasa.
Elisabet
14 junio, 2014 a las 16:56Vianellys Engelstdadter,
Jajajaja!! Ciertísimo!! Encontrarte a un vecino es también «terrorífico». Te pones a temblar sólo al ver que abren la boca por si no entiendes! Lo mejor es hablar tú primero ;D
Gracias por el comment!
Jéssica
13 junio, 2014 a las 14:25Guten Tag!!!
Efectivamente he recibido la «llamada del Terror» hace escasamente dos días… Que manera de sudar muchacha!!!
En esta ocasión de 1&1 para contestar a una pregunta que hice vía e-mail…. yo pensé que responderían por mail pero noooooooooooo… claro que nooooooo…
Cuando sonó el teléfono, vi el número alemán y respondí … mi cara era un poema jaaaaaaa jajajaaaaaaa y la de mi marido , ni hablemos, creo que aún se está riendo.
Me entró tembleque, sudores, … hasta tartamudez jajajajaaaaaaaaaaa
Con los nervios una no sabe ni que decir, se me trababan las palabras , mezclaba los conceptos y no hablemos de la conjugación de los verbos….. vamos! me hubiese gustado verme a mi misma por un agujero !!!!
Buuuueeeeeeno no estuvo mal, me defendí como pude y convencí al interlocutor de que me enviase un mail…. jajajaja jajajja jajajajaaaaaaaa
Primera prueba ¡superaaaada!!!
No hay nada que hacer, … a seguir estudiando !!!!
Que razón tienes Elisabet, es terror puroooo.
saludos desde Zeuthen!!
Elisabet
14 junio, 2014 a las 16:57Jéssica,
Jejeje… Una vez superada la primera, la siguiente ya no te para nadie!! 😉
Gracias por el comment guapa!
Saludos***
Ferrer
13 junio, 2014 a las 15:49Según mi experiencia, si se le dice a un alemán que no se habla alemán no habla más despacio sino que grita. Pero grita igual de rápido. Nunca olvidaré al turista alemán que en un área de servicio en plena Sicilia se degañitaba diciendo que quería ¨EIN O-SAFT!¨ Y cuando no le entendían, lo repetía otra vez, en vez de intentar decir Orangensaft, que igual por Orangen daba una pista al pobre del mostrador, y otra vez y otra, erre que erre. Podría haberle echado una mano, pero me pareció tan prepotente y estúpido que le dejé ahí, sin su O-Saft ni nada. Creo que el del mostrador también acabó por entenderle, pero prefirió hacerse el sueco siciliano por los mismos motivos que yo. Jejeje…
Elisabet
14 junio, 2014 a las 16:59Ferrer,
Jajajaja!! Siempre me arrancas una super sonrisa con tus comments!! Gracias.
Qué grande el alemán. Te aseguro que probaré a decirles lo de que no entiendo para ver cómo gritan ;D
Saludos***
Arantxa BL
14 junio, 2014 a las 18:28Jajaja qué bueno! Yo de momento solo me enfrento a llamadas del terror en español xD que ya dan bastante miedo cuando son de alguna compañía telefónica.
Un abrazo!
Elisabet
14 junio, 2014 a las 19:07Arantxa,
Las llamadas de compañías telefónicas en español ciertamente pueden llegar a dar también mucho terror!!! Jajajaja
Gracias guapa 🙂
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