Hoy te traigo una deliciosa receta y una bonita historia.
Si me lees desde hace tiempo sabrás que los «Kuchen» {pasteles} son mi gran debilidad. Podría estar backeando {horneando} en bucle día tras día. No necesariamente comiéndomelo todo, pero hornear y descubrir nuevas y dulces creaciones en la cocina me hace feliz.
Es más, estoy emocionada por saber que actualmente el segundo post más leído de este blog es el de los 11 pasteles y dulces alemanes que tienes que probar y en el que os doy acceso a todas sus recetas.
También sabrás que adoro el momento del desayuno. Me gusta prepararlo con amor cada día {a veces incluso dejo la mayor parte lista la noche anterior antes de irnos a dormir para ganar tiempo y poder remolonear un par de minutos más por la mañana}. De lunes a domingo.
Así que no te extrañará que te diga que todo esto en realidad «es culpa» de Anna, la creadora del club del desayuno bonito y de la magia de las redes sociales, en este caso de instagram.
Todo comenzó el día que vi esta foto de Teresa en la preciosa galería del club del desayuno bonito en instagram. No aparece aún ningún desayuno mío, pero quizá algún día. Y me haría mucha ilusión.
Cuando visualicé ese esponjoso bizcocho de Teresa, además de quedar prendada de toda su preciosa galería con tan exquisitas creaciones fotografiadas con tanto gusto, le pregunté si tenía la receta en algún lugar. No nos conocíamos de nada, pero vi su hermosa foto y me animé a preguntárselo, puesto que me gustaría disponer de la receta para probarlo, ya que siempre que pruebo uno muy parecido, mi Zitronenkuchen, confieso que me queda algo crudito en su interior.
Ella me indicó que no, que utilizaba su instagram para mostrar sus creaciones pero no estaban publicadas las recetas en ningún lado. Así que me animé a invitarla a compartirla aquí, con todos los seguidores de crónicas germánicas, puesto que sé que muchos adoran los pasteles tanto como yo.
¡Y Teresa aceptó encantada! Ilusión infiniten!!
Hoy en exclusiva para ti la receta del bizcocho de mandarina. Además, como la receta de mi Zitronenkuchen es la única que está en alemán sin traducir al español en este blog, he pensado que hoy te traigo la receta del bizcocho de mandarina en español.
Receta bizcocho de mandarina
Ingredientes
Usaremos un molde rectangular de 25 cm
+ 125 g de mantequilla
+ 175 g de azúcar
+ 150 g de claras de huevo (aproximadamente las claras de 4 huevos tamaño XL)
+ 250 g de harina de trigo
+ 30 g de harina de maíz
+ 1 cucharada de levadura
+ ½ cucharadita de bicarbonato
+ Una pizca de sal
+ 250 ml de buttermilk*
+ 1 cucharada de zumo de mandarina
+ Ralladura de mandarina
*Nota especial sobre la «buttermilk»: El Buttermilk (en alemán Buttermilch) era el suero que se obtenía cuando la nata se batía y se convertía en mantequilla y por eso se traduce como «suero de mantequilla». En la actualidad es leche cultivada. En Alemania es algo más fácil de encontrar en los supermercados. En España no tanto. Pero Teresa nos explica cómo hacerlo en casa: con 250 ml de leche y añadiendo dos cucharadas de zumo de limón, remover y dejar reposar al menos 10 minutos. También puede sustituirse por yogur líquido o leche.
Preparación
Precalentar el horno a 180º.
Tamizar las harinas junto con la levadura, el bicarbonato y la sal. Reservar.
Batir la mantequilla con el azúcar hasta obtener una crema suave y esponjosa.
Añadir las claras de huevo y seguir batiendo a velocidad baja hasta que estén totalmente integradas. Incorporar el zumo y la ralladura.
Agregar la mezcla de harina en cuatro veces, intercalándola con el buttermilk, comenzando y terminando con la harina. Batir hasta que esté incorporado. Es preferible hacerlo con una espátula de silicona y con movimientos suaves y envolventes.
Engrasar el molde donde vaya a ser horneado el bizcocho.
Hornear aproximadamente 40/45 minutos o hasta que al pinchar con un palillo en el centro del bizcocho, éste salga limpio.
¿Te gustaría que Teresa nos desvelara más de sus bellas creaciones y nos trajera más recetas al blog? ¡Di que sí!
10 Comentarios
Ganas de alemán
22 marzo, 2017 a las 9:22Ummm, se me hace la boca «Wasser». A veces los bizcochos más sencillos son los más ricos. Sí a más como éste por favor, de los «Kuchen» tradicionales.
Yo hago la versión con naranja y sólo por el aroma que deja en la casa (y parte del edificio) merece la pena 😋
LG
Laura
Elisabet
22 marzo, 2017 a las 10:45Gracias Laura!!
Un abrazo*
Pilar
23 marzo, 2017 a las 21:15Acabo de leer el post más leído y no me extraña!! Los probaría todos! Y siempre me pregunto dónde consigues tus platos y tazas, ¡¡¡son de lo más bonito!!!
Elisabet
23 marzo, 2017 a las 21:22Muchas gracias Pilar!
Las tazas las compré en una tienda inglesa en Stuttgart. Son de la marca «Royal Albert». Aún sigo enamorada de ellas como desde el primer día ☺️
Yolanda
24 marzo, 2017 a las 8:38Danke schön! Me encanta, lo prepararé para un fin de semana. Por favor, mas receta de deliciosos manjares. 🙂
Elisabet
24 marzo, 2017 a las 10:00Muchas gracias Yolanda! Oído cocina 😉
Me alegro de que te guste ☺️
Sara
10 abril, 2017 a las 17:35Tiene una pinta estupenda 🙂 !!!
Elisabet
10 abril, 2017 a las 17:49Muchas gracias Sara!
Pronto más 😉
a b
26 abril, 2017 a las 2:51Que raro que lleve harina de maiz ¿no será fécula de maiz?
En mi familia se comía algo parecido, torta de naranjas con una cremita espesa también de naranjas muy rica!!
La crema hecha con maizena o fécula de maiz, manteca, yemas de huevo y jugo de naranjas, pero al prepararla hay que remover mucho y tener en cuenta que no levante temperatura pues la fécula se quema con facilidad.
a b
26 abril, 2017 a las 2:58Perdón es almidón de maiz no fécula.