Cada día me voy a dormir más tarde y me levanto más temprano. Cualquier día me cruzo conmigo misma por el pasillo.
Y esto es un poco lo que sucede con la Navidad en Alemania. En ocasiones pienso que los alemanes se adelantan tanto que un día empalmaremos la Navidad de un año con la del año siguiente.
Si te lo propones, en Alemania puedes empezar a preparar la Navidad en septiembre, porque el material fresco navideño es como las meigas: «haberlo haylo».
Pero con «Prinzessin S» confieso que hay algo de la Navidad en Alemania que me encanta. En lugar de escoger un día para poner tooooodos los adornos navideños en casa, escogemos un protagonista de la Navidad y le dedicamos un día en exclusiva.
Así, poco a poco, y junto a papi, lo disfrutamos aún más. Y lo primero que preparamos este año es un dulce navideño muy típico en Alemania, muy rico y que a su vez es un bonito adorno para la casa. Y hoy lo montamos en el blog: Lebkuchenhaus.
Pero hemos de darnos prisa, ¡alguien está intentando comerse todos los irresistibles componentes de la casita! 😉
Preparando la Navidad en Alemania y decorando la casa con una Lebkuchenhaus
Lo que primero disfrutamos preparando la casita es algo que, de momento, no puedo traerte al blog: su olor. Ha sido destapar la caja de todos los materiales y quedar himnotizada por el aroma que se desprende.
Para explicarlo por si no has tenido ocasión de oler un Lebkuchen diría que es algo así como un cruce entre el olor al entrar en una bonita panadería y el olor de un algodón de azúcar mientras lo están preparando. Mmmmm…
Una vez se disponen de todos los materiales, las paredes y techo de Lebkuchen para la Haus – casa – y los adornos, tocará preparar «el cemento» para construirla.
Y ese cemento se elabora batiendo una clara de huevo y añadiéndole 150g de azúcar glas.
Cuando se obtiene una mezcla uniforme se deposita en una bolsa de plástico (o manga pastelera con punta muy fina) y se recorta la punta. De manera que se irá untando por la pared y juntando con cuidado.
Cuando la casita está levantada, imaginación al poder. Se van añadiendo trocitos de la mezcla como si de puntos se tratara por toda la casa y se van enganchando distintas chucherías.
Nosotros teníamos hasta suculentos Brezeln.
En el tejado aparece ¡el gato de la bruja piruja!
Y la Lebkuchenhaus suele ir acompañada de algún personaje para decorarla en alguna estantería. En este caso de la bruja y de los mismísimos Hänsel y Gretel, que estoy pensando traer próximamente a la sección de cuentos infantiles en alemán.
Una de las representaciones de la casita la conocimos al visitar el Märchengarten, el jardín de los cuentos.
Pero… ¿Dónde está Gretel?
Gretel no está por ninguna parte.
Imposible fotografiar a Gretel y traértela. Puesto que creo que es mejor traerte la carita de «Prinzessin S» cuando al despertar, antes de ir a la Kita, secuestra a Gretel para llevársela con ella. ¡Si te fijas la lleva en la mano! Imposible quitársela.
12 Comentarios
Patrizia
15 diciembre, 2014 a las 9:12Jeje, en este caso la brujilla es ella! No sé que tienen las casitas de Lebkuchen que mi niño (once añazos ya) también me la ha pedido, imagínate! Así que tendréis casitas para rato. Pero mola.
Elisabet
16 diciembre, 2014 a las 10:23Sí! Es genial construirlas y divertirnos juntas. Gracias guapa.
Besote*
Viole
15 diciembre, 2014 a las 9:28Pero buenooooo mi estimada Elisabeth, compraste elaborado ya el pan? porque yo no he visto eso por mi zona, me encanta como quedo la casita, aquí vi casas ya terminadas pero no por hacer. Con respecto a lo navideño, recuerdo que algunos años atrás eso no era así. Las cosas las sacaban ya en el mes de Diciembre =( y eso me molesto jajajajajaja porque no me daba tiempo de pensar en la decoración de ese momento. A mi eso de poner el árbol el mero 24 no me gusta!!! me encanta sentir el aroma a pino dentro de la casa, escuchar música navideña, todo el mes de Diciembre, etc etc. De todas maneras solo son 31 días para disfrutar de la época. Felicidades por tu obra de arte. Que la disfrutéis =)
Elisabet
16 diciembre, 2014 a las 10:24Viole,
Jajaja!! Elaborar las paredes de la casita de Lebkuchen en casa será el siguiente nivel ;D
Gracias guapa.
Besos***
Rosa
15 diciembre, 2014 a las 11:55Felicidades, la casita os ha quedado preciosa. Y tu princesa es guapísima. Personalmente me gustan mucho más las navidades en Alemania que en España, es ¿cómo decirlo? más intimo, más romántico, más navidad. Y que en Nochebuena se enciendan las luces del árbol con los regalos en el suelo también lo encuentro precioso. Los ojitos de los niños cuando se abre la puerta del salón para ver lo que tienen de regalos y el ambiente de luces y fiesta es maravilloso. Felices Navidades, Elisabeth, junto con tu pequeña familia.
Elisabet
16 diciembre, 2014 a las 10:25Muchas gracias Rosa.
Y Feliz Navidad para ti y para los tuyos también!
Dalia
15 diciembre, 2014 a las 14:22¡¡ Que buena pinta tiene esa casita !!
Me gusta esta costumbre/tradición navideña de Alemania =) La verdad es que tiene que ser muy divertido construirla (intentando no comerte las chuches ^^)
Elisabet
16 diciembre, 2014 a las 10:26Gracias Dalia!
Mariana
16 diciembre, 2014 a las 10:39Elisabeth!
Este fin de semana nos toca hacer nuestra Lebkuchenhaus.
Gracias por la receta del cemento!!
Un beso y Frohe Fest!!!
Elisabet
17 diciembre, 2014 a las 10:56Mariana,
De nada. Disfrutarla y ya contarás qué tal!
Saludos***
Pequeños Pinceles
16 diciembre, 2014 a las 12:09Me encanta la casita y la idea de escoger un protagonista cada Navidad.
Que cara de felicidad que tiene y de pillina. Feliz Navidad.
Elisabet
17 diciembre, 2014 a las 10:57Pequeños Pinceles,
Jejeje… Muchas gracias! Feliz Navidad*