«Made in»
Made in Germany, made in China o made in Spain son, hoy en día, menciones que nos acompañan diariamente de la forma más corriente en nuestras vidas en el momento de adquirir un producto.
Pero, ¿cuál fue realmente el origen para que un producto utilice la firma del país del que proviene? Y, aún más importante, ¿qué es lo que le puede aportar a ese producto el hecho de llevar dicha firma?
Hoy me animo a compartir ese origen en la nueva crónica, con Alemania como principal protagonista.
El caso Made in Germany
Para conocer el origen de la denominación «Made in» debemos remontarnos al siglo XIX.
Y es que precisamente fue el país considerado como la cuna de la revolución industrial, Gran Bretaña, quien exigió en el año 1887 etiquetar con «Made in Germany» a todos los productos procedentes de Alemania, como una medida de precaución para sus consumidores y de protección para su propia industria.
Deutschland no fue el único país obligado a etiquetar a sus productos con denominación de origen. También fue una exigencia a cualquier productor que exportara un producto a Gran Bretaña, como Francia y Bélgica, por ejemplo.
Por aquel entonces, Gran Bretaña destacaba hasta llegar a considerarse como «el gran fabricante» gracias a contar con prestigiosos ingenieros. Sin embargo, la competencia extranjera en el mercado inglés no tardó en aparecer. En el caso de productos alemanes debido a la desaparición de altos impuestos a la exportación en Alemania.
Considerando a los productos extranjeros en el mercado inglés como «burdas copias» de los productos ingleses, cuando Gran Bretaña tomó dicha medida: exigió a todos los productores extranjeros etiquetar con «Made in» los productos que llegaran. Básicamente como medida para proteger su industria, sus productos y alertar a sus consumidores.
En el caso alemán, los productores ingleses pretendían reflejar la supuesta «baja calidad»de los productos alemanes. La sorpresa vino cuando la gente se dio cuenta de que los productos alemanes eran iguales y en ocasiones incluso de mayor calidad que los productos ingleses.
Lo que en un inicio nació como una medida cautelar y de atención para protegerse de un producto con peores prestaciones se tradujo, posiblemente, en la mejor campaña de marketing vivida hasta la fecha: un producto con el sello «Made in Germany» era sinónimo de gran calidad, cuidado diseño y magnífica eficiencia.
La pregunta que nos podríamos formular ahora sería: ¿sucederá lo mismo con los actuales productos de la gran amenaza asiática con el sello «Made in China«? O, incluso llevado al terreno nacional, ¿sucederá lo mismo con la lucha por la supervivencia de las centenarias y hasta ahora incuestionablemente primeras marcas frente a la aparición de las potentes marcas de distribución también conocidas como «marcas blancas» con productos que, en gran cantidad de ocasiones, nada tienen que envidiar a los primeros?
4 Comentarios
Dalia
28 enero, 2015 a las 13:00Alaaa no tenia ni idea de esto, nunca me había informado del «Made in…»
Yo pensaba que era algo que hacia cada país por si mismo para identificar sus productos en otros países, no sabía que había sido una idea inglesa.
La verdad es que si veo que algo pone «made in germany» siempre pienso en buena calidad.
Y sobre los productos de China… yo creo que se están poniendo las pilas para que sus productos tengan una calidad-precio bastante razonable, y el sello «made in china» ya no asusta como antes.
^^
Elisabet
28 enero, 2015 a las 20:52Gracias Dalia por compartir tu opinión!
Cristina Lorenzo
28 enero, 2015 a las 17:05Interesante como siempre, Elisabeth. Curiosamente aunque los productos no esten fabricados en Alemania, en este caso puedo hablar principalmente de textiles, exigen máxima calidad cuando son encargados por firmas alemanas. Concretamente, hoteles cinco estrellas, restaurantes isla Sylt, etc, encargan en Portugal diversas prendas, como polos, sudaderas, y otro tipo de prendas como toallas, incluso marcas de ropa alemanas, y son excelentes comprobado cuando encuentras algún excedente a muy buen precio.
Creo que lo mismo pasa en China, Bangladesh, etc. porque calzado de calidad realmente caro, suele ser de buena calidad aunque sea fabricado en otros paises bajo un riguroso control de calidad.
Elisabet
28 enero, 2015 a las 20:53Gracias Cristina por tus bonitas palabras para el blog y por aportar más información.
Un saludo*