Ejem…
Sí, has leído bien el título.
Si quieres te lo repito, por si acaso: «Hacer pipí sentado no es cosa de niñas en Alemania» 😉
Obviamente para escribir la crónica de hoy me he documentado de forma distinta a la habitual. Más que nada porque es algo que una no puede vivir en primera persona. Y desde aquí agradecer a Daniel.J su inestimable ayuda!
Así que hoy me animo a compartir un tema bastante «de chicos» y que parece estar muy arraigado en las costumbres alemanas en el momento de ir a hacer pipí. Sí, no digo «ir al baño» porque al baño puede uno ir a hacer más cosas. Bueno, mejor no sigo por aquí que la vamos a liar…
Hoy hablamos de pis. ¿¿¿De pis??? Sí, hasta en algo tan básico como ir a hacer pipí podemos ser distintos los alemanes y los españoles. Porque ¿se puede «hablar de pis» de forma fina, verdad?
En España tengo comprobado que a un chico no puedes hablarle de compresas porque se ponen muy nerviosos con este «material de chicas». De hecho, ahora los chicos no os enfadéis, pero no sabéis difernciar un «salva slip» de una «compresa».
¿Pero no hoy no ibas a hablar de pis?
Sí, pero necesitaba mencionar esta premisa para remarcar la importancia de lo que cada uno conoce de su género, sea masculino o femenino, y tan poco conoce del otro. Las chicas, pues, en España no dudamos de que los chicos meáis de pie.
Y, claro, una llega a Alemania y sigue pensando que es así. Que los chicos hacen pipí de pie. Y un día te encuentras en el país germano frente a esta imagen:
¿Una señal de que un chico no puede hacer pis de pie?
Entonces se te desmontan todos los esquemas. Resulta que en Alemania muchos de los niños hacen pipí sentados. Mientras que en España siempre había tenido la sensación de que si un chico hiciese pipí sentado los otros se reirían de él, en Alemania puedo comprobar que no es así.
En muchas de las casas existe esta tradición en aras a no dejarlo todo perdido al mear de pie. Pues qué quieres que te diga! Dos votos a favor de los alemanes en el tema:
uno por ser más cuidadosos y limpios en un lugar compartido
y dos, porque seguro que en Deutschland ninguna chica tiene que bajar la tapa!
Por cierto, seas chico o chica, en Alemania si vas a un lavabo público acuérdate de llevar algo de monedas porque se supone que hay que pagar. En teoría se paga por el mantenimiento del baño. Esto no es exclusivo de Alemania, se hace también en otros países, pero es importnate tenerlo en cuenta porque más de una vez me he encontrado en la tesitura de ingeniarme algo por ir sin monedero al baño.
Y, para que veas que hasta los propios alemanes se toman este tema con humor, te traigo un chiste para adornar el post.
Esta imagen la descubrí gracias a un tweet de mi querida Duquesa @duquesadepankow. Sra. Duquesa, no sé qué haría sin sus tweets! Desde aquí confieso que, quienes me conocen, saben que tengo auténtico pavor a los gatos, pero aún así le envío un beso fuerte para Cookie!
Digamos que la traducción de lo que están diciendo los colegas alemanes que están meando de pie es: «diez años de matrimonio no pasan en balde». Refiriéndose a que la mujer lo ha vuelto a educar ;D
¡Antes de irnos!
¿Sabías que los alemanes tienen una expresión que hace referencia a «una pausa para hacer pipí»? Se denomina Pinkelpause y se suele utilizar en las excursiones de los niños cuando para el autocar y todos van al baño. Al parar el autocar la profesora indica con un gritito: Pinkelpause! Digamos que es el eufemismo para indicar que los niños tienen que ir a hacer pipí.
O incluso se puede soltar también en el mundo de los adultos!
Ahora, ¿lo harán todos sentados?
20 Comentarios
Violetta
14 abril, 2014 a las 10:18Como siempre muy acertado tu comentario. =)
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:12Jejeje… Gracias Violetta! ;P
María
14 abril, 2014 a las 10:42Buenos días!
Me hace mucha gracia tu comentario de hoy. Tengo un niño de 3 años y medio, y hace cosa de un año, es cuando empezó a hacer pipí el solo. Aprendió aquí en Alemania, y claro está, sentado. Sólo hace de pie cuando estamos en el parque o en algún sitio que el baño no parece muy limpio, o cuando le lleva su padre y le dice «tienes que hacer pipí como los hombres» ;P.
Eso de higiénico… pues hasta que le cogen el truco, porque todavía hay días que se le olvida meter «la colita» en el retrete y acaba todo mojado, su ropa, y por supuesto el baño, así que no es tan sencillo!! ajajaj
Gracias por tus post, me encantan!!
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:16María,
Gracias a ti por animarte a compartir tu divertida experiencia con el tema de hoy!
Y por tus felicitaciones para el blog 🙂
Montserrat Varela
14 abril, 2014 a las 15:06Muy divertido tu post, como siempre 🙂
Pero yo defiendo que los hombres hagan pis sentados, y mi hijo mayor lo hace así quiera o no. Si no, lo ensucian todo, y ¿quién lava después el retrete?
Una servidora, que, por supuesto, no está por la labor.
O sea que, queridísimos hombres, seáis de dónde seáis: una de dos, o meáis sentados y no ensuciáis nada, o a limpiar el retrete si os empeñáis en mear de pie.
He dicho 🙂
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:27Montserrat,
OLÉ!! Jajajajajajajaja! 😉
Jéssica
14 abril, 2014 a las 19:32Jaaa jaaaa jaaaaaaaaa!!! muy graciosa la viñeta !!! Tienes tooooda la razón como se te olvide el monedero no haces «Pis» … en los centros comerciales aun puedes pagar poquito… pero como estés en la estación de tren… como no tengas un euro, jajajaja no meas !!! hombre yo comprendo que hay que mantener los lavabos limpios… pero un euro … es un poco extremo no? y estos tikets de descuento teórico en el próximo uso del baño?… yo no he logrado utilizarlos… tienen truco o qué?
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:32Jéssica,
Descuentos para la próxima??? Jajajajaja! Aún no he visto de esos. Permaneceré bien atenta ;D
Reb
14 abril, 2014 a las 21:20Me ha encantado lo del «Pinkelpause!», Lo que aprende una leyéndote! En Frankfurt (que es donde está mi novio) te cobran 70 cént por ir al baño en el metro, pero te dan un ticket de 50 cént con el que puedes pagarte un café, me parece que está muy bien pensado.
Aprovecho el comentario para agradecerte por el blog, me está siendo muy útil para ir aclimatándome a lo que será mi futuro próximo. Lo del «élfico» aún lo llevo muy mal, estoy en el capítulo 2 luchando con el nominativo y el acusativo.
Muchas gracias Elisabet!
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:37Reb,
Sí! También he visto tíquets de esos. Un marketing muy bien apañao.
Muchas gracias por tus palabras para el blog 🙂
Constanza
14 abril, 2014 a las 22:44Hola Elisabet! llegué por casualidad a tu blog y te digo desde ya, que me encantó!
Yo soy Chilena y hace casi un año estoy de novia con un Alemán (de Berlín) nos conocimos en Buenos Aires, Argentina y ambos vivimos acá mientras seguimos de intercambio en nuestras respectivas universidades.
Bueno, en resumen, me hace muchísima gracia leer este post, puesto que hace unas semanas atrás recién noté que mi novio hace pis sentado!! y me explicó que es la forma normal allá, porque ensucian menos y porque «no quiere hacer ruido y que yo escuche» demasiado cuidadoso! cosa que, obviamente, me encanta…
Estoy leyendo otros de tus post, porque pronto iré a Alemania a conocer y quiero estar familiarizada con algunas cosas ahahah!
Danke für die Daten! 😉
Elisabet
14 abril, 2014 a las 23:43Constanza,
Pues menuda ilusión que hayas llegado al blog, que te guste y me lo cuentes.
Gracias por compartir tu experiencia!
Ferrer
15 abril, 2014 a las 10:04¡Muy bien observado, Elisabet! Así que hoy la costumbre ya está generalizada, ¡bien por la higiene! Si te interesa la historia de la lucha feminista a este nivel ¨informal¨ o cotidiano, léete ¨Tod eines Märchenprinzen¨, de Svende Merian (http://de.wikipedia.org/wiki/Der_Tod_des_M%C3%A4rchenprinzen) y sobre todo, la respuesta del Märchenprinz, ¨Ich war der Märchenprinz¨ que escribió Henning Venske bajo seudónimo. Köstlich! Así se las gastaban en los 80, qué nostalgia… ¿Y ahora ya es mainstream? Quién lo iba a decir…
Una propuesta para mear con estilo: orinar. ¿Y una meada finolis? Micción.
Elisabet
15 abril, 2014 a las 20:19Ferrer,
Ilusión infinita cada vez que pasas por el blog. Aprendo un montón con tus consejos!
Gracias!!!! Libros apuntadísimos para cuando vuelva que ahora estoy por… Barcelona! ;P
Saludos***
Ferrer
21 abril, 2014 a las 16:38Me alegro de que te alegres 🙂 Te aviso de que no son fáciles de leer, sobre todo el original de Svende Merain es… pesadillo y muy de su época. Pero seguro que en internet o en tu Antiquariat preferido los encuentras los dos por ein Appel und ein Ei, así que adelante!
Me imagino que las jóvenes que te leen y comentan no suelen pasar por el retrete de los hombres, por eso te mando dos pintadas frecuentes en las paredes de los meódromos en Alemania y en España, porque las dos tienen que ver con el tema de hoy y son muy instructivas:
Tritt näher, er ist kürzer, als du denkst!
Mea feliz, mea contento, pero tío*, ¡mea adentro!
* En vez de tío se pueden decir otra cosa mas basta y no pasa nada.
Elisabet
22 abril, 2014 a las 0:34Ferrer,
Jajajaja!!!! Al principio pensaba que una era la traducción de la otra y me estaba volviendo loca!! Luego lo he vuelto a leer 😀
Gracias por tu intervención!!!
Diana Garcés
19 abril, 2014 a las 5:13A mi me parece genial y de hecho todo un acierto, sobre todo por aquellos que olvidan bajar la tapa y dejan todo chorreado 🙁 Además que es más cómodo 😀 jajaja
Elisabet
19 abril, 2014 a las 18:32Hola Diana,
Qué bien que te hayas animado a comentar! Gracias y besote*
Desencriptando el idioma infantil en Alemania y otras historias del mundo de los niños - Crónicas Germánicas
4 febrero, 2015 a las 18:41[…] algo: “Mami tengo Áua” o “me he hecho Áua”. Ni tiene sed ni se ha hecho pipí, simplemente se ha hecho daño. Y seguidamente te pedirá un Pflaster – […]
Luigui Lorl
26 mayo, 2021 a las 14:15A mi me encanta hacer pipí como las mujeres, eso lo aprendí de mi madre y mis primas ya que cuando era niño siempre las miraba orinar en situaciones donde hay un baño y en las que no (como por ejemplo en el campo), así que desde chico siempre me entro la curiosidad de que si yo también podría sentarme y agacharme para orinar como ella y mis primas, y también quería saber como se sentía, así que comencé a probar la experiencia de sentarme en la taza cada vez que iba al baño hacer pipí.
También cuando voy de paseo por el campo o en el bosque y tengo que hacer pipí, inmediatamente sigo el ejemplo de mi madre y mis primas, así que me pongo detrás de un árbol o un arbusto y me agacho para hacer pipí como ellas y adopto esa postura para hacer pipí cada vez que me anda de la pipí y estoy en una situación donde no hay un baño para sentarme a orinar y descubrí que agacharse para hacer pipí es una postura super comoda y placentera, igual que sentarse para mear, y eso no tiene nada que ver con preferencias sexuales y esas cosas, las posturas para orinar es cuestión de gustos y comodidades, saludos