Cada Freitag en el blog nos tomamos un Kaffee und Kuchen virtual, donde compartimos lo más destacado de la semana, nuestros planes para el finde o lo que más nos apetezca contarnos.
¿Coges tu taza y te unes al café?
Si nos estuviéramos tomando un café juntos te contaría…
… hoy me apetecería compartir una reflexión como madre y como hija al mismo tiempo. Y es que cada vez que me doy cuenta de que mi hija ya es prácticamente consciente de todo lo que sucede, pienso que está comenzando a establecer sus recuerdos. Momentos y vivencias que le marcarán y le acompañarán a lo largo de su vida.
Algo que hemos hecho esta semana me ha hecho recordar algunos de los mejores momentos de mi infancia. Y, lo mejor de todo, ninguno de ellos está relacionado con que mis padres me comprasen nada.
Pero curiosamente este pensamiento me surgió en el momento de comprar un detallito a mi hija por algo especial que hemos celebrado esta semana.
Le iba a comprar alguna de sus películas favoritas, hasta que me crucé con…
Die unendliche Geschichte: La historia interminable
Sé que «La historia interminable» es una película de hace muchos años {Dios qué vieja me siento ahora} pero es una de las mejores películas que he visto nunca.
Además, la vi por vez primera en un entorno que hizo que descubrirla fuera aún más especial. Una tarde de verano, en los colegios que habían delante de casa en el pueblo donde veraneábamos, organizaron un cine para los niños. Aunque no fuéramos alumnos del colegio, todos los niños del vecindario podíamos asistir.
¿Te imaginas las circunstancias en las que vimos aquella película?
Encima de un mueble alto dispusieron una televisión {obviamente ni mando a distancia tenía} con un aparato de vídeo debajo. Todos los niños sentados en sillas o en el suelo alrededor.
Echaron «La historia interminable» y después «Cazafantasmas».
Esa tarde fue una de las mejores tardes de mi vida. Era la primera vez que iba sola a algún lugar. No soy capaz de recordar mi edad exacta, ni tan sólo quiénes de mis amigos fueron también. Pero sé que era pequeña.
Todos esos recuerdos emanaron en el momento de descubrir, mientras rebuscaba otra cosa, la película frente a mis ojos.
No lo dudé. Compré «die unendliche Geschichte» para disfrutarla con mi hija.
De todas formas, a pesar de que está recomendada para mayores de 6 años, tenía mis dudas, puesto que hay alguna escena que puede resultar un poco «cruda». Pero como decidí verla con ella, sabía que podía aclarar cualquier malentendido.
Y la vimos.
La primera vez, porque ya he perdido la cuenta de las veces que me la ha pedido después, fue algo impactante. Sobre todo en la escena del caballo que se hunde en las arenas movedizas. ¿Cómo se dirá «arenas movedizas» en alemán? Algo con «Matsch» seguro.
Es una película americana, pero originariamente alemana, del fantástico autor Michael Ende, quien, curiosamente, tiene «fin» como apellido. También autor de «Momo».
Es una película que, para mí, es incluso más para adultos que para niños. El mensaje principal apenas lo comprendemos cuando somos pequeños. Más allá de las aventuras de Bastian, la moraleja de la historia la comprendemos realmente cuando somos «mayores». La importancia de seguir teniendo sueños y dejar volar nuestra creatividad e imaginación para seguir avanzando y crecer, se ven atemorizadas y destruidas por nuestros miedos, la «nada».
La importancia de seguir teniendo sueños y dejar volar nuestra creatividad e imaginación para seguir avanzando y crecer, se ven atemorizadas y destruidas por nuestros miedos, la «nada».
La mejor escena es, para mí, cuando el lobo conversa con Atreyu y se lo aclara. Le aclara que «Phantasien hat keine Grenzen» {Fantasía, que en la película representa que es un país que tienen que salvar, no tiene fronteras}.
Como ves, adoro esa forma de explicar a los niños y no tan niños la importancia de darnos cuenta de que «el miedo» tan sólo está en nuestro interior. Cuando somos valientes, cuando confiamos en nosotros mismos y en nuestras posibilidades, crecemos y descubrimos mucho más de lo que nos podríamos llegar a imaginar.
Todo ello surgió de aquella tarde de verano, sentada en el suelo y disfrutando con tantos otros niños de aquella maravillosa película.
Si estuviéramos tomando un café juntos… ¿qué me contarías?
¡Feliz finde! Ein schönes Wochenende!
12 Comentarios
dania durand
4 mayo, 2018 a las 5:21muy bella experiencia y a mi recuerdo que me han pasado con tantas sobre todo con la pelicula ET de Spielberg; y ahora que soy adulta me doy cuenta que mientras somos jovenes y estamos en la infancia se nos aprende a no tener miedo, a confiar , a tener en alto los valores de la amistad, es una lastima que ya una vez siendo adultos es imposible guardar y tener todo estos valores, sino es que una se dice no importa dania donde una puerta se cierra miles se abren, lindo fin de semana dania
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 8:35Muy cierto Dania! Preciosa ET también. A mi hija le encantó. Gracias por pasarte al café. ¡Feliz finde!
Cristina Lozano Chico
4 mayo, 2018 a las 8:53Arenas movedizas= der Treibsand
Otra de mis pelis favoritas es «Forrest Gimp» que también trata de conseguir metas y perseguir sueños.
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 9:07Oh 😲 Muchas gracias Cristina! Un beso a Canarias 😘
Judith Sarmiento Arias
4 mayo, 2018 a las 9:21Preciosa película, no hace mucho la vimos con nuestro peque, tiene 9 años y disfrutamos mucho recordando nuestra infancia. La verdad es que estamos haciendo un Remember (E.T., Regreso al futuro, Indiana Jones…) de las pelis que vimos de pequeños y ahora las vemos con él. Es curioso porque algunas las vimos de muy peques y ahora pienso que lo de la edad recomendada….en fin, en muchos casos es bastante subjetivo. Lo bueno es que algunas las hemos encontrado en Alemán así que también esta siendo un buen ejercicio de aprendizaje para nosotros. Él nos aclara muchas palabras, es nuestro profe particular y eso que solo llevamos tres años viviendo en Alemania, pero aprenden a velocidad de rayo. Quien fuera niño!!! Ahora la próxima peli de familia en el cine SOLO de Star Wars…. esta siendo un reto para nosotros lo de las pelis en el cine, pero poco a poco vamos entendiendo mas!
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 9:38Muchas gracias Judith por compartir tu experiencia!! Geniales todas las aportadas
Andrea
4 mayo, 2018 a las 9:54Muy bella la historia…
No estoy tan segura pero tambien se puede decir: Shifting Sand= Arena movedisa.
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 10:00Gracias Andrea!
vicente montaña guillem
4 mayo, 2018 a las 18:11No he visto esa película aunque he oído muy buenas referencias de ella; la veré. A mi la película que me impactó y me dejó gratamente sorprendido por sus maravillosas playas y preciosas canciones, fue Blaue Hawai de Elvis Presley. La vi en Konstanz am Bodensee en el año 62. Es de lo que te hablaría si estuviéramos tomando café. Un saludo.
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 20:56Muchas gracias por tu aportación Vicente! ☕️
Rosa
4 mayo, 2018 a las 18:45Buenas tardes Elisabet, vaya recuerdos buenos me has traído con el post de hoy. Ví la primera vez, la película, en el autobus con una excursión del colegio. Feliz fin de semana!!!!
Elisabet
4 mayo, 2018 a las 20:56Me alegro entonces Rosa! Feliz finde! 😘